Exposición de Javier Setas en La Capilla

 

Vaqueros-Ventana-Amarilla-Destacada
El acto pictórico tiene una extraña magia, cuanto más te adentras en él va desplegando rincones de uno,  que uno mismo ni siquiera podía imaginar. Pero para ello ha de darse una entrega sincera a la pintura y al acto de pintar.
Javier Setas se fue acercando a la pintura como el observador que trata de capturar aquello que tiene delante de los ojos; y lo hizo desde el más puro realismo, un realismo casi fotográfico en el que fue recogiendo muchos de los rincones y vistas de éste pueblo donde creció y ahora expone de nuevo.  Pero como a la mayor parte de los pintores que recorren ese camino, llega un momento que se agota, que hay una encrucijada, un callejón sin salida en el que de alguna manera uno ha de volver sobre sus propios pasos.
Javier en lugar de eso se giró hacia la pared y escaló hasta las ventanas, abriendo un nuevo camino a su pintura.
De aquellos cuadros de perspectivas cuidadas, pulcro perfeccionismo en la factura y sombras de una presencia importante, se fue quedando con  la riqueza cromática y de texturas que le ofrecían las paredes, los múltiples juegos de desconchados huella del paso del tiempo, y las ventanas y puertas como promesa de un misterio a descubrir.
Javier Setas ha dado un salto importante en su pintura en éstos últimos años, se ha arriesgado a probar con otra forma de acercarse a la realidad, y lo ha hecho en un mayor hiperrealismo si cabe, pues está llegando a incorporar a la propia superficie pictórica objetos reales como botones, trabillas de pantalón, cuerdas a modo de cableado eléctrico…. Y es curioso, siempre me llamó la atención en sus anteriores obras la excesiva importancia que daba a los detalles, especialmente al cableado eléctrico cruzando fachadas y calles tan habitual en éste lugar…. Ahora ese interés por el detalle ha llegado a, literalmente, salirse del cuadro en una búsqueda de mayor libertad en su hacer pictórico.
Porque viene de una tradición muy realista , sino podríamos llegar a ver una cierta cercanía con la obra de Tapies y su gusto por los muros y materiales adheridos al lienzo. Quien sabe, quizás con el tiempo se quede con la materia  y…. ya se verá.
“Realidades paralelas” es una exposición que juega con la mirada desde el interior al exterior como en las dos vistas a Barcelona, y del exterior a un interior misterioso como en toda la serie de ventanas que convierten el espacio de la Capilla en la fachada de una vivienda, una de tantas de las que ha pintado de Toledo, Santorini, o de Arguedas.  Al mismo tiempo  es una obra que establece un juego de realidades paralelas entre la ficción de la pintura  retiniana y la utilización del objeto real como objeto pictórico; abriendo múltiples vías a su pintura.
Sol Aragón.
La-Capilla-Agosto-2016-Cartel

La-Capilla-Agosto-2016-1

La-Capilla-Agosto-2016-2

La-Capilla-Agosto-2016-3

La-Capilla-Agosto-2016-4